Retratos. El tiempo de la las reformas y los descubrimientos (1400-1600) by Gerardo Vidal Guzmán

autor:Gerardo Vidal Guzmán
La lengua: spa
Format: epub
editor: RIALP SA
publicado: 2013-07-21T00:00:00+00:00

FRANCISCO DE VITORIA

La defensa de los indios y el nacimiento del derecho internacional

Durante todo el s. xvi, América constituyó para España un inmejorable escenario donde desplegar la vitalidad de sus hombres. Conquistadores, trotamundos y aventureros vieron en ella un inesperado amasijo de oportunidades. Tenían razón: la empresa de Colón había abierto un horizonte sin confines, y quienes se mostraban capaces de soportar privaciones y peligros, podían esperar gloria, riqueza y poder a raudales.

Con todo, el entusiasmo que, a primera vista, generaba aquel panorama no hacía justicia a la complejidad de la empresa. En realidad, la obra española en América arrastraba interrogantes capaces de poner en jaque la exaltación que había seguido al descubrimiento y a los primeros años de la conquista.

Para comprender el dramatismo de la discusión, resulta conveniente partir de su primer capítulo, un célebre episodio ocurrido el año 1511, en el principal asentamiento hispano en América. Era un domingo de adviento y el dominico fray Antón de Montesinos celebraba misa en la catedral de la isla La Española. El oficio tenía lugar en presencia del mismísimo gobernador, D. Diego Colón, y de la élite de la sociedad española en América. Todo aquel auditorio, sin excepción, debía su fortuna y su renombre a las riquezas que había amasado en el Nuevo Mundo.

Hubiera podido ser un oficio como cualquier otro. Pero una sorda tensión, latente durante mucho tiempo, acabó por explotar ese día en la cara de todos. La homilía dominical se inspiraba en un versículo del evangelio ('yo soy la voz que clama en el desierto'). Al tomar la palabra, el sacerdote olvidó toda razón de prudencia, y después de advertir que él mismo era 'la voz de Cristo en el desierto de esta isla', comenzó a denunciar con voz tonante los abusos de los conquistadores.

Recordó la multitud de arbitrariedades soportadas por los indígenas en los últimos años y, ante la mirada atónita de los fieles, espetó desde el púlpito preguntas de fuego:

Decid, ¿con qué derecho y en virtud de qué justicia tenéis a esos indios en una tan cruel y horrible servidumbre? ¿Quién podría autorizaros a hacer todas estas guerras detestables con unas gentes que vivían tranquila y pacíficamente en su país, y a exterminarlos en un número tan infinito, con matanzas y crueldades inauditas? ¿Cómo los tenéis tan oprimidos y fatigados, sin darles de comer ni curarlos en sus enfermedades, que de los excesivos trabajos que les dais, se os mueren y, por mejor decir, los matáis por sacar y adquirir oro cada día? ¿Y qué cuidado tenéis de quién los adoctrine y de que conozcan a su Dios y Criador, sean bautizados, oigan misa, guarden las fiestas y domingos? Éstos, ¿no son hombres? ¿No tienen ánimas racionales? ¿No estáis obligados a amarlos como a vosotros mismos?

El índice acusador de Montesinos pretendía despertar las conciencias amodorradas de los españoles. ¿Qué facultaba a los conquistadores para dominar, esclavizar y hacer la guerra a los originales habitantes de las tierras descubiertas? ¿En virtud de qué supuesto derecho podían olvidar sus deberes para con ellos?

No se trataba de una denuncia cualquiera.

descargar

Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.